Evitar la deforestación de los bosques ha sido un tema de polémica que ha estado en discusión por mucho tiempo. Sobre todo por parte de las organizaciones mundiales a favor de la conservación ambiental.
Siendo la deforestación una consecuencia de las actividades esenciales para el hombre y que ha incrementado a través de los años.
Donde el mismo, necesita cubrir necesidades de interés comercial y el sostenimiento de su raza por medio de los recursos que ofrece la naturaleza. Bien sea para vestirse, alimentarse y subsistir en el medio ambiente.
Consecuencias que arroja la deforestación de los bosques
El problema está en llevar a cabo la tala indiscriminada de árboles a grandes escalas. Sin tomar en cuenta ningún tipo de prevención futura o reposición a la naturaleza.
Parte de los problemas que acarrea la deforestación de los bosques es la eliminación de la vegetación sin derecho a replantarse. Acabando con el hogar de muchas especies de origen animal y vegetal. Por lo que se ven gravemente comprometidas, ocasionando en muchos casos su extinción total.
Además, se estimula la erosión de los suelos, atrayendo consigo consecuencias graves. Principalmente, un desequilibrio ecológico, degenerando los suelos fértiles por la falta de oxigeno y retención de las aguas de lluvia. Lo que provoca también las inundaciones de las cuencas.
Y lo que es aun más importante para el ser humano y lo afecta directamente. Se resta a si mismo parte de los recursos naturales que usa como fin económico y para sobrevivir.
Incentivar a la reforestación
Una de las soluciones para evitar la deforestación de los bosques en gran medida, es incentivar a la reforestación. Recuperando espacios naturales a través de la siembra de árboles y plantas. Los cuales, en su mayoría, han sido escenarios de catástrofes ambientales como incendios no intencionales. O las actividades destructivas del hombre.
Y no solo como objetivo de recuperar espacios afectados, sino también aprovechar los ya existentes.
De esta forma se aumenta la calidad de los suelos, el oxigeno, el agua y se preserva la vida del planeta tierra y de quienes la habitamos.
Inclusive, desde hace ya un buen tiempo, varios países del mundo se han dedicado a establecer estos planes de reforestación organizada. Logrando demostrar su efectividad, rescatando gran parte de sus zonas boscosas. Como es el caso de Europa. Quienes en el 2016 registran haber regenerado un tercio de sus bosques en comparación a un siglo atrás.
Medidas preventivas en la ganadería y agricultura
Parte de la eliminación de la vegetación y el daño de los suelos es por culpa también de la cría de ganado y el sembradío para la agricultura.
Ya que durante estas actividades se suelen usar químicos o productos insecticidas para mantener la siembra o el alimento para el ganado. Lo que provoca un mal manejo de las aguas y la tierra, incitando su contaminación y la desmejora en la calidad del oxigeno.
Cada uno de nosotros puede crear hábitos. Que por muy sencillos que parezcan, si logran evitar la deforestación de los bosques a largo plazo. Como reciclar una hoja de papel usándola por ambas caras.
También se puede apoyar a las empresas de sello ecológico, comprando sus productos para el hogar y consumo, certificados para la preservación ambiental. O sembrando árboles en lugares aptos. Solo nosotros podemos cambiar la forma en que nos aprovechamos de los recursos de la naturaleza sin generar tantos problemas.