La deforestación ha afectado al ciclo del agua en varios aspectos. Se explica que los bosques contienen elevadas cantidades de agua. Aunque también la posee la materia organiza en descomposición y los suelos.
Entonces esto funciona tal cual como una esponja. Luego los árboles junto con los suelos hacen liberar agua paulatinamente. Esto mediante los manantiales subterráneos que alimentan a los ríos y lagos.
El bosque y su procedimiento de esponja
Los árboles absorben como una esponja el exceso de agua presente en días lluviosos, de esta manera, se reducen las inundaciones.
Es liberada el agua paulatinamente, permitiendo que fluya el río en una estación seca. Además, en tiempos secos se mantiene la humedad por la transpiración y, en ese proceso, afecta al ciclo del agua y puede llegar a ocasionar lluvias en verano.
Efecto del bosque
Al ser eliminado un bosque, también erradica el procedimiento de absorción o también llamado esponja. Los bosques toman el ciclo del agua y, a su vez, lo transpiran como vapor hacia sus hojas.
De este modo, las hojas que suelen caer durante la época de otoño absorben el agua de los suelos. Por esto si es anulado el bosque, entonces el espacio será más seco y la lluvia al caer ocasionará erosión en los suelos.
Conclusión del efecto de la deforestación en el ciclo del agua
Es importante tener en cuenta que cuando los árboles y el aire son reducidos es más seco el espacio.
En consecuencia, menos lluvia cae y los lagos y mares no podrán cambiar significativamente. Por lo tanto, se espera una elevada vaporación en el lugar de la deforestación y el resultado es la mengua del ciclo del agua.
A fin de cuentas, la deforestación ha causado que las zonas sean más secas al afectar el ciclo del agua. De este modo, se tiene en consideración implementar una planificación de gestión forestal para que se reduzca el impacto.